Reflexión

Pasamos la vida buscando respuestas, sin nunca haber hecho la pregunta adecuada. Ellas están allí, esperando las palabras justas. Cada quien tiene su mandala

viernes, 14 de diciembre de 2007

El éxito de la lucha de los docentes por reafirmar los derechos laborales

Lo conseguimos con la lucha
Ojo!!! con los que quieran hacerse padres de la criatura

El día de ayer el “nuevo” director de escuelas Mario Oporto, derogó la antiestatutaria resolución, que ordenaba el descuento de los días de paro y actividades con 115 b2 y b3, realizadas por los docentes provinciales. Un verdadero éxito para todos los docentes y en particular para la luchadora docencia platense.
Los descuentos, que carecían de cualquier legalidad, tenían el propósito de desmoralizarnos; de quebrar nuestros reclamos por la vía del hambre; de declarar nuestras medidas por fuera de la ley.
Lo que pasó con el dictado de esta resolución, es que fue la propia dirección de escuelas la que quedó en la ilegalidad.
Al descontarnos el salario, Solá y Puiggrós terminaron vulnerando toda la legislación laboral nacional y provincial; la ley 10579 (Estatuto del docente). Los descuentos vulneran además, el código del trabajo con respecto a los derechos adquiridos. Al tener un carácter intimidatorio, se vuelven violatorios de la propia Constitución Nacional, ya que se practican en función de chantajear al trabajador para que no haga uso del derecho constitucional a reclamar un salario digno (Art. 14 bis sobre derechos y garantías).
Con los descuentos la patronal provincial intentó una intervención directa en la organización de los trabajadores de la educación; porque, la intención de los mismos era romper la lucha de los Sutebas opositores y de esta manera, el gobierno felipista, toma partido por su burocracia adepta del Frente gremial.
Toda esta maniobra queda hoy, reservada para el tacho de la basura.

No hubiera sido posible sin lucha

La docencia platense no se dejó intimidar. La respuesta a los descuentos fue una nueva muestra de la voluntad de lucha que recorre las bases del gremio.
Nuestras asambleas siguieron funcionando y votando medidas: marchas, acampes, encadenamientos, ocupaciones de edificios públicos; desconociendo las voces de los “profesionales organizadores de la derrota” que llamaban a levantar todo; a negociar por otros “medios” (nunca dejaron en claro a que medios se referían) ; a considerar que la fortaleza conseguida por la patronal, después de los resultados electorales de octubre, nos invalidaba seguir adelante. Estos sectores consiguieron que algunos de nuestros compañeros bajaran la guardia -son profesionales en esto- pero, la voluntad, el animo y la dignidad que nos acompaña desde que comenzamos a luchar, impidió que sus ideas pudieran triunfar sobre todos nosotros y, para el escarnio de ellos y la sorpresa de los poderosos -que piensan que los docentes nos dejamos quebrar en nuestras convicciones por un descuento ilegal- la lucha siguió adelante, hasta obtener este primer éxito: la derogación de la resolución represiva y la devolución del dinero robado.

¿La victoria, tiene muchos padres?

Las victorias hacen que los padres aparezcan como hongos en tiempo de humedad.
Resulta que ahora hay quienes declaran que hay que agradecerle a los burócratas sindicales o a la sensibilidad de los “nuevos” funcionarios, el que nos devuelvan lo robado. De ninguna manera.
Fue la continuidad de las medidas; el heroísmo de compañeros que dieron todo por ganar; la guapeza de seguir adelante que anida entre nuestras bases lo que produjo este logro y que, sin duda, producirá los futuros.
Ni la burocracia sindical, que pidió a los gritos un escarmiento para las “maestras rebeldes de La Plata”, ni los “organizadores de derrotas” que abandonaron la lucha ante el primer obstáculo, merecen tal paternidad. Esta, corresponde a la combativa docencia platense y a sus convicciones incorruptibles.

“Dime donde hay un derecho, así lo negocio” R. Baradel

El acuerdo alcanzado por los gremios y Mario Oporto debe mantenernos atentos; la consigna de la dirigencia gremial parece ser “donde hay un derecho, hay una negociación”
Las noticias periodísticas dan cuanta del comienzo de un “pacto social” entre la DGCyE y la burocracia sindical. Este pacto empieza por la reglamentación y el recorte del alcance del 115 b3 (licencias gremiales para convocar a asambleas y marchas). Según Oporto, hay que consensuar sobre el uso de esta licencia. Los docentes, deberán informar a la patronal, con tiempo suficiente, sobre la realización de asambleas o cualquier otra actividad que dispongan.
Este recorte de un derecho estatutario atenta en contra de la organización y la soberanía gremial que no debe recibir interferencias en sus acciones por parte de los representantes de la patronal.
Baradel, Petrocini y tuti cuanti de los participaron de esta reunión con el director de escuelas, ya se manifestaron a favor de esta reglamentación. “Lo del 115 en la Plata, es un festival”; vienen declarando hipócritamente desde hace meses, cuando todos sabemos muy bien que varios representantes de “la celeste” local hacen un uso indiscriminado del 115 a veces hasta por meses enteros.
La reglamentación de los 115 pactada por los gremios y la patronal, se inscribe en un ataque en regla en contra de la docencia que lucha. Ataque que tuvo su máxima expresión en el discurso de asunción de la presidenta Cristina Kirchner.

La presidenta Cristina Kirchner, asumió atacando a los docentes:

“En mi época-dijo la señora presidenta - había clases todos los días y los docentes sabían más que los alumnos” Y esto lo declara aquella, que se preocupa más por saber que cartera le va con el vestido blanco que por mejorar la educación de los argentinos.
Estas afirmaciones, en el acto de asunción, fueron repudiadas por el conjunto de los que trabajamos en las aulas. Nosotros, que conocemos la realidad de nuestros alumnos no necesitamos la ironía oficial para darnos cuenta de lo que falta. Actuamos en consecuencia uniendo a nuestro reclamo salarial, el reclamo de una mejor educación pública.
Los docentes nos hacemos cargo de la violencia, del hambre, de las escuelas que se vienen abajo, del material para que nuestros niños aprendan.
¿Que nos puede criticar aquellos que han compartido el poder por décadas, votando las leyes más nefastas en contra de la escuela? ¿ Con qué derecho se refieren a nosotros, los responsables de todas las situaciones de penuria social por la que atraviesa nuestro pueblo?

Sin embargo los dichos no inquietaron a la dirigencia de CTERA, tampoco a Hugo Yasky o a Roberto Baradel, hombres del kirchnerismo que dijeron estar "conceptualmente de acuerdo con el discurso" de Cristina.

Compañeros: terminamos el 2007 luchando por nuestro derecho a un salario digno, a mejores condiciones de trabajo, defendiendo la escuela pública y con un gran logro la conquista de la devolución de lo que es nuestro.

Nos que da pendiente para el 2008 conseguir un salario acorde a la canasta familiar, el incremento de nuestro básico, el mejoramiento de la infraestructura en las escuelas, etc.

Terminamos un año rico en experiencias. Nos quisieron derrotar y no lo lograron.
Hay que seguir adelante.
Viva la lucha de la docencia platense.
Viva la lucha de la docencia provincial.
Viva la lucha de la docencia argentina.


La plata, 14 de diciembre de 2007
Delegados de base

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