Para discutir en las "jornadas institucionales"

Espacio libre para pensamientos,actividades y opiniones que hacen a la actividad docente.
Declaración de “Delegados de base” (Suteba La Plata)
Vamos al paro por 48 hs, seguimos nuestra lucha hasta ganar
(Aporte para la discusión docente en las jornadas institucionales de miércoles 5 de setiembre)
Algo histórico viene aconteciendo desde el lunes 6 de agosto entre la docencia platense.
La resuelta unidad de miles de voluntades, demostrada por los trabajadores de la educación de nuestra ciudad, nos ha colocado como una clara referencia para el conjunto de los reclamos de la docencia provincial y de otros gremios en el ámbito regional.
La espiral inflacionaria que licua nuestros salarios, día a día, ha servido como detonante para que digamos “no se puede seguir esperando, hay que salir a la lucha por el aumento salarial ya!!” Pero, a no confundirse, el reclamo salarial no es el único motivo que nos impulsa.
El malestar de la docencia tiene profundas motivaciones.
Lo encontramos, en el desprecio demostrado de parte de los gobiernos provinciales y nacional por nuestra labor. En el sistemático ataque y la falta de respeto cotidiana a las que los funcionarios nos someten. En las arbitrariedades de las que somos objeto. En la sanción de leyes que atentan en contra de la educación pública. En el lamentable estado de nuestras escuelas desde el punto de vista de su infraestructura y en la violencia que circula en las mismas.
Lo encontramos, en la represión artera que ya se ha cobrado la vida del compañero Carlos Fuentealba. En el atropello que representantes del gobierno nacional llevaron adelante contra nuestros compañeros de Santa Cruz, donde los funcionarios provinciales pasean sus lujosas camionetas por sobre el cuerpo de maestros y profesores; mientras, la gendarmería transforma escuelas y jardines en cuarteles.
Nuestra paciencia, se agota entonces, por muchas causas.
La cuestión salarial es fundamental, pero nuestra indignación no pasa de largo cuando vemos, como año tras año, se hacen cada vez más ostensibles la hipocresía y el desparpajo oficial para quitarle el cuerpo a su responsabilidad sobre el estado de la educación.
Las declaraciones que los funcionarios y sus candidatos le dirigen a la opinión pública, están llenas de patrañas que intentan envenenar la conciencia de los padres para que se pongan en contra nuestra.
Desde el gobernador, hasta el último de los representantes de la patronal educativa se declaran “preocupados por educación de los niños” y dicen “estar trabajando seriamente para solucionar el problema educativo” que, según ellos, “se resuelve a partir de una cambio de actitud en los maestros”. En definitiva, intentan justificar su ineficacia y su responsabilidad ante la comunidad educativa, echándonos la culpa de todos los males.
¿Quiénes son los responsables?
Las escuelas carecen de lo mínimo indispensable para su funcionamiento y, pese a los contratos de obras, descaradamente abultados, las obras no se hacen y la plata no aparece.
¿ Dónde está el dinero? ¿A qué usos se destinan las partidas, que supuestamente mejorarían las condiciones edilicias? ¿Quiénes ganan en medio de este derroche? ¿Cuántos vidrios, cuadernos, estufas y techos se podrían hacer con los fondos que se destinan a la campaña electoral? Entre lo ya gastado y lo que se piensa gastar hasta el 28 de octubre, se habla de cifras cercanas a los diez millones de pesos.
Mientras nos acusan de ser los responsables del estado de la educación pública, para enfrentarnos con la comunidad y negarnos un miserable aumento salarial, en las escuelas aumentan los abandonos y las tasas de repitencia en todas las ramas y niveles.
Según un informe oficial, en el nivel Polimodal, el 28,8% (3 de cada 10 niños) dejan la escuela. También creció la deserción en los otros años de ese ciclo. El informe señala que: “Pese a los anuncios sobre el carácter obligatorio que adquirió la escuela secundaria en la Provincia, cada vez son más los alumnos que abandonan sus estudios en este nivel”.
Como se ve, no son los paros ni las distintas medidas de fuerza que los maestros y profesores llevamos adelante los que hacen que nuestros niños dejen la escuela. Es el clima de miseria económica y social en que se debate nuestra población; la lacra del trabajo infantil; la desmoralización provocada desde los ámbitos oficiales, con sus despiadadas críticas a la escuela pública y a los docentes que nos desempeñamos en ellas.
Si a todo esto le sumamos, los cada vez mayores subsidios estatales a las escuelas privadas y la falta de una orientación práctica de parte de los funcionarios del área educativa destinada a incentivar la educación publica, obtendremos una percepción real de lo que viene sucediendo en las aulas.
Nuestra lucha, por un mejoramiento de las condiciones salariales y laborales de los trabajadores del magisterio provincial, va en una dirección diferente. El aumento salarial reclamado será el que nos permitiría perfeccionarnos, planificar y poner toda nuestra formación e ingenio -en lugar de correr de una escuela a la otra- a disposición de nuestros alumnos. Sólo lograremos esto, si obtenemos un sueldo digno acorde a la canasta familiar; trabajando un cargo por docente se abrirá, además, la posibilidad de que nuevos colegas que sufren la desocupación, ingresen al sistema.
Frente a la debacle, a las que las políticas oficiales reducen a la educación pública y gratuita en nuestra provincia, nuestra lucha se eleva como una alternativa verdadera y genuina para brindarle a nuestro pueblo el derecho a educarse.
“El problema docente”
Para Solá -como para Filmus-Kirchner- Puiggrós- los docentes nos hemos transformado en un problema. Entiéndase bien, no se trata de que los docentes tenemos problemas, sino que, para ellos, somos el problema.
Quizás, quienes entendieron en forma más brutal, por donde cree el poder que pasa la solución a “el problema docente” fueron: Daniel Varizat, al acelerar su 4x4, y antes Jorge Sobisch, al ordenar la represión y el asesinato de nuestros compañeros neuquinos.
Es que los gobiernos, que mandan a votar leyes de privatización de la educación publica y someten a constantes ajustes el derecho a la educación de los ciudadanos; prefieren un pueblo analfabeto para explotarlo más fácilmente y son concientes que los educadores nos opondremos con todas nuestras fuerzas a este “genocidio cultural”, al que intentan someter al pueblo argentino.
El poder, ve en los trabajadores del magisterio “el problema” que le impide cumplir con el objetivo ajustador.
Lanza campañas difamatorias e irrespetuosas sobre nosotros como profesionales de la educación, con el objetivo de separarnos de los padres y de la opinión pública en general. Es en esta línea, que las declaraciones de la Licenciada Puiggrós cobran sentido, cuando se refiere a que el aumento de un peso al básico docente, le representan a la provincia “un gasto de 12 millones de pesos anuales”. ¿ Qué clase de cuentas realiza la licenciada? ¿Por qué no se informa, que cada diputado(entre dietas, subsidios, viáticos y gastos de representación) le cuesta a la provincia más de 300 mil pesos anuales?¿Por qué, no le dice a la sociedad, cuanto cuesta el mantenimiento de la estructura de funcionarios en educación, con sueldos de miles de pesos mensuales, incluida ella?.
Todas estas falacias económicas intentan demostrar que los maestros somos los que quebramos la provincia. Mentiras. Son los subsidios por cerca de 30 mil millones, que el gobernador Solá le entrega anualmente, a los capitalistas amigos del régimen; las evasiones de las grandes fortunas al pago de impuestos; los amañados arreglos con el Ceanse; son los sueldos de privilegio de los funcionarios provinciales, etc. los que vacían las arcas. Escuelas pobres y hospitales pobres en medio de la provincia más rica del país.
La unidad de los maestros con la comunidad educativa es el único reaseguro para defender la existencia de la escuela pública. Por eso debemos dirigirnos a los padres, explicándoles pacientemente que esta no es una lucha entre pobres, sino una lucha para defender el derecho a una educación de calidad para sus hijos; nuestros alumnos.
La Paritaria y el rol de los gremios provinciales
Las Comisiones paritarias, son comisiones especiales, que tienen la facultad de analizar puntos específicos de las relaciones laborales (salarios, condiciones de trabajo, horarios, etcétera).
Las decisiones adoptadas por las comisiones quedan incorporadas de manera indefectible. Siendo el Ministerio de Trabajo (Solá) la autoridad de aplicación.
La dirección celeste del Suteba (la Feb y otros sindicatos menores) que han venido transando, desde hace años, con todas las medidas antieducativas del gobierno felipista; se adjudicó a si misma el rol de “delegada paritaria”, sin ningún tipo de llamamiento a asambleas en las escuelas, ni a la elección de delegados paritarios de base que discutan democráticamente el pliego de reivindicaciones, comenzando, naturalmente, por un salario igual a la canasta familiar, para presentar en las negociaciones con el gobierno.
Las paritarias de Solá y la celeste, son paritarias burocráticas y propatronales, que disponen una serie de acuerdos entre “amigos”; cuyo fin: será el de cubrir las formas al desmantelamiento de nuestro estatuto, pintándolo “como una conquista de la docencia”.
Pero, ¿qué clases de reivindicaciones pueden aprobar a favor de los trabajadores, si en estas comisiones no se puede discutir un aumento salarial, ya que, desde un principio se acordó que no se puede alterar el presupuesto provincial votado a favor del ejecutivo?.
Los acuerdos salariales que se alcanzaran en estas paritarias (o cualquier otro que "afecte cuestiones económicas") "deberán basarse en la existencia de créditos presupuestarios vigentes" y "será sometido –en última instancia- a la consideración del Ministerio de Economía provincial. Por eso desde el principio consideramos a las paritarias como un verso.
Las paritarias son un campo de negociación en muchos terrenos, entre el gobierno y los gremios provinciales; pero ninguno, como ha quedado demostrado después de casi un año de puestas en funcionamiento, a favor de los docentes.
Baradel y Petrocini que arreglaron con los gobiernos, nacional y el provincial, la existencia de "mecanismos de autorregulación del conflicto” mientras se reúnan las comisiones paritarias (tales como la limitación de las medidas de acción directa) eran conscientes a principio de año, que los precios se disparaban en forma irrefrenable y que el aumento de 100 pesos al básico, sería literalmente licuado en pocas semanas. Sin embargo, privilegiaron sus acuerdos con el poder antes que las necesidades de los docentes.
El gobernador Solá, que sabe perfectamente a quienes tiene enfrente a la hora de negociar, sigue burlándose de nosotros. Ahora, nos hace el ridículo ofrecimiento de que levantemos nuestra lucha por el pago de una deuda que el Estado Nacional mantiene con los educadores desde el año 99/2000.
Solá, sin duda, debe creernos estúpidos AL OFRECERNOS COMO AUMENTO EL PAGO DE UNA DEUDA. Peor que esto, nos piensa siervos y entonces se anima a decir públicamente que "Con ese pago y con el aguinaldo los docentes pueden estar cubiertos y empezar a discutir el salario en el 2008”. Todo esto motivaría la risa, si no fuera tan patético.
La famosa “autorregulación de los conflictos”, arreglada con los burócratas sindicales, es lo que en la actualidad le sirve a los funcionarios provinciales para expresar que los paros están prohibidos por ley.
De ninguna manera esto es así. El Art. 18 de la ley de Paritarias declara expresamente que: “En ningún caso la educación podrá ser considerada como servicio esencial en los términos del art. 24 de la ley 25877, ni a los efectos de restringir el derecho de huelga”. Es que, si el parlamento provincial hubiera legislado una ley que prohibiera las medidas de fuerza, los “representantes de la democracia” estarían votando en contra de la propia Constitución y de la Ley de Asociaciones Profesionales que tiene un alcance nacional.
En su momento se intentó votar una aberración jurídica de este tipo; pero, lo único que hasta ahora prohibía los paros, fue la actitud cómplice de las direcciones burocráticas de los Baradel- Perillo y Petrocini, no la ley.
“Me matan si no trabajo y se trabajo, me matan”
En La Plata en lo que va del año la novedad no fue sólo que nevó; la novedad desde el inicio de nuestro conflicto, es que llueven amenazas.
Nos amenazan los inspectores, los funcionarios, ciertos periodistas y hasta algunos directivos.
Nos amenaza Solá y el propio Baradel. Las amenazas van y vienen, y es casi más habitual encontrarlas sobre nuestra mesa que las incomprables verduras o la carne.
Nos amenazan de las formas más variadas: que nos descontaran el sueldo, por los días de paro; que actuamos en contra de los niños; que Baradel va a pelear en la justicia para que no descuentes los paros del Frente Gremial; mientras que, los paros de los docentes de la Plata no son su problema; que nos van a poner falta injustificada en el contralor, etc.
Amenazas y más amenazas.
Sin embargo, la lucha que los docentes platenses llevamos adelante, no hace más que crecer. Las escuelas se suman a cada nueva medida votada en las asambleas y las movilizaciones son cada vez más masivas.
Es que, no sólo votamos un plan de lucha por un salario básico de 1200 pesos. Votamos por recuperar nuestra dignidad. Votamos, valientemente, por la defensa de nuestra profesión como trabajadores. Votamos, para que se solucionen nuestros problemas, con la convicción de que no somos “el problema”... somos la solución.
Y vamos a ir por ella hasta el final..
Esta semana vamos al paro por 48 hs. los días lunes 3 y martes 4 de setiembre
ü Exigimos, que el gobierno provincial atienda nuestras demandas ¡Ya!!
ü Exigimos, 1200 pesos de salario básico por cargo.
ü Exigimos, que no haya restricciones de ningún tipo para la discusión salarial con el gobierno provincial y que los representantes de nuestras asambleas participen en estas discusiones, para defender nuestros derechos.
ü Exigimos, que haya publicidad de las modificaciones que se realicen a nuestro Estatuto y que sean las asambleas docentes las que las discutan.
ü Exigimos, que no se nos descuenten los días de paro; por considerar al Gobierno Provincial, como el único responsable de la perdida de días de clase, al no dar urgente solución a nuestros reclamos y, de esta manera, seguir prolongando el conflicto.
Sigamos adelante
Nuestras medidas son masivas porque nuestra lucha es justa.

Delegados de base (Suteba La Plata)
Setiembre 2007